Hermanísima

Podrá haberse casado con un señor al que le gusta llamar la atención pidiendo intimidad, pero Telma Ortiz mantiene un perfil bajísimo como hermana de la princesa de Asturias. De hecho, toda su familia lo hace. Quizá sea Henar Ortiz, la tía materna, la única que va por libre. En su cuenta de Twitter (@HenarOrtiz) retuiteó estos ciento y pico caracteres de @mareaverde1: “#EnEstePaís se recortó en 2012 un 22% en Educación y un 21% en Empleo. Pero a la Casa Real solo un 2% y a la Iglesia un 0%”.

Lo cierto es que Telma, salvo por su marido y alguna persecución callejera de fotógrafos, no da cuartos al pregonero. Lo último es ese reportaje de esta semana en la revista Love donde vemos a Telma y Jaime del Burgo en Asturias. Todo lo contrario que Pipa Middleton, que aprovecha su puesto de hermanísima real sin el más mínimo pudor (nada comparable a un trabajo temporal en el ayuntamiento de Barcelona).

No es solo que la prestigiosa editorial Penguin le soltase casi medio millón de euros de adelanto por Celebrate, una birria de libro donde daba consejos para fiestas (fue en el prólogo de esa magna obra donde decía sorprenderse de ser famosa por su hermana, su cuñado y su culo). Es que, según algunas fuentes (el Mirror, por ejemplo), la NBC estadounidense le habría ofrecido un trabajo. Ser corresponsal real. 450.000 euros por 20 apariciones en The Today Show, el programa matinal de la cadena. Tendría que comentar cosas de tanta enjundia como la muestra de jardinería de Chelsea, pero no deja de ser la hermana de la duquesa de Cambridge. También es verdad que un portavoz de la NBC ha negado que semejante oferta se haya producido.

En todo caso, comparando, no queda más remedio que valorar la discreción de Telma Ortiz. Pipa es hermanísima; Telma solo es hermana.