Deberes

 El repaso a las revistas de los miércoles no tiene esta semana gran cosa referida a la princesa de Asturias. Eso sí, acabamos volviendo a ver, y con detenimiento, la cara de palo de doña Letizia en la misa celebrada por Don Juan en el Palacio Real. Qué tensión, qué expresión de pocos amigos, qué ganas de estar en otro sitio, aunque sea haciéndose una colonoscopia. Aunque puede estar tranquila porque peor es esa foto que se repite en varias publicaciones de la infanta Cristina como mordiéndose un labio, poniendo morrito (no sabemos si sabría dónde estaba su marido, qué estaba haciendo o qué iba a hacer: según ‘El Confidencial’, el mismo día de la ceremonia religiosa en el Palacio Real, Urdangarín estaba en un casino londinense gastándose los cuartos que parece que sí tiene).

Menos mal que, con respecto a doña Letizia, también se nos sirven otras imágenes, otras imágenes donde aparece sonriente. Que no es que sea noticia que sonría, pero casi. Una es de su reunión con el patronato de la Fundación Científica de la Asociación contra el Cáncer (es presidenta de honor de la AECC). Iba sola, que es cuando más cómoda se la ve. La otra es de la reunión con el patronato de la Residencia de Estudiantes. Esta vez acompañaba al Príncipe, como es tradicional. Es la revista ‘Semana’ la que, además de destacar a la Princesa en esos dos actos (y en la misa de centenario del Conde de Barcelona), publica la foto más llamativa.

Se trata de una fotografía de don Felipe y doña Letizia en el palacio del Pardo y con motivo de la reunión con otro patronato, el de la Fundación Príncipe de Asturias. Antes de ese encuentro, los fotógrafos captaron a la pareja riendo. Es posible que ella salga con los ojos entrecerrados y las piernas para dentro, en una postura tipo Lina Morgan con zapatos de Magrit, pero lo cierto es que la sonrisa de la Princesa es tan franca y su expresión tan relajada (y hasta, redoble, simpática) que tendría que ponérsela como deberes, ensayarla en el espejo.