De vértigo

El vestido sesentero de Mango que la Princesa repitió en la entrega de los premios Buero de teatro no gusta a todo el mundo. Leemos en ‘Semana’ el titular: “La princesa Letizia, radiante…”. Sin embargo, dentro, un comentario le hace un descosido: “…El traje no tiene categoría. Se ve mala la tela y muy mal confeccionado… No debe ir tan corta, no le favorece nada, sus piernas no son tan bonitas, están demasiado delgadas y no tiene edad para ir tan corta… Tiene los hombros estrechos y los trajes lamidos no te favorecen, necesitas algo más de volumen por arriba para simular las curvas que no tiene… No me extraña que te den pitadas. Como ven el traje, tratan al paje…”. Ouch.

No sabemos quién se lleva más palos, si la ‘couture’ de Mango o la Princesa. Esa misma princesa a la que la revista francesa ‘Point de vue’ pone en su portada (no en la regular, que es para Felipe y Matilde de Bélgica, sino en un ‘Especial España’). Dice la publicación que hace la pelota a los ‘royals’ que en el “campo de ruinas” de nuestra monarquía doña Letizia emerge irreprochable junto a Felipe, multiplicando las apariciones oficiales, con o sin su marido. Y cita la proclamación de Guillermo de Holanda (de la ausencia en la boda de Magdalena de Suecia, ni pío), una visita a Sevilla, una inauguración en el Museo del Prado… Resaltan que la lista de sus compromisos oficiales en la primavera de 2013 provoca vértigo. Y porque no saben que también fue al concierto de Hombres G (o será que no entró para el cierre).

Dentro de la revista, más España. Figuras del Gotha que enseñan Marbella, Sevilla o Madrid o un paseo por los palacios que nuestra Familia Real utiliza para sus ceremonias oficiales (aquí tenemos que reconocer que no es lo mismo usar los palacios un rato que tener el barbour en los armarios, como hace Isabel de Inglaterra a lo largo del Reino Unido). También salen paradores y hasta la Alhambra. Pero la portada es para la reina mora. Regia, con tiara, banda y condecoración. Todo lo contrario del vestido de Mango.