Doña Letizia, Nadine Heredia y el duelo de estilo que pudo ser y no fue

Este miércoles, el presidente de Perú y su esposa, Nadine Heredia, finalizaban su visita de Estado a España ofreciendo una recepción en honor a Don Felipe y Doña Letizia en el Palacio de El Pardo. Como es habitual en este tipo de visitas, el mandatario invitado agasajóa su anfitrión por el trato recibido y lo hizo con un acto informal en el que ofreció un pequeño concierto Tania Libertad, una conocida cantante peruana. En este evento, quedó patente que las dos damas, Letizia y Nadine,han hecho muy buenas migasen estos dos días que han estado juntas. Así lo prueban las múltiples imágenes en las que aparecen juntas charlando y riendo.

Así pues, lo que a priori iba a convertirse en un duelo estilístico como fue el encuentro de Doña Letizia con la primera dama mexicana,finalmentequedó en nada. El principal motivo por el que la Reina y la primera dama apenas han sido comparadas en cuestiones de vestimenta es que la última no ha puesto mucho empeño en esta 'lucha'. Nadine, quien es conocida en Perú por su fuerte carácter y personalidad, no estaba dispuesta a ser partícipe de un duelo de estilo, y para ello se ha decantado por looks sobrios y sencillos de los que había poco que comentar.

En esta recepción en el Pardo se ha podido ver que las dos damas tienen formas de actuar muy distintas. Mientras la peruana escogía un vestido en encaje verde esmerada que combinó con salones negros para intentar pasar desapercibida, Doña Letizia apostaba por un estilismo de lo más atrevido con unvestido negro de tirantes que por delante es liso y por detrás deja la espalda al aire con una tela transparente bordada con motivos florales. Se trata de un diseño de Feipe Varela que estrenó en su viaje a Estados Unidos en noviembre de 2013 y que ya entonces despertó mucho interés. La Reina completó su atuendo con salones de Prada, una cartera de Hugo Boss y unos pendientes de diamantes.

Una primera dama muy discreta

En todos los actos a los que ha acudido durante estos dos días, Nadine ha demostrado que las cuestiones estilísticas no le quitan el sueño. Por ello, en su maleta han predominado las piezas discretas. Asu llegada al Palacio de El Pardo, la primera dama eligió un vestido azul klein con drapeado lateral y salones negros con lazo. Pocas horas más tarde,para su almuerzo en el Palacio de La Zarzuela, cambió su vestido por otro también azul que tampoco era nada llamativo.

Pero cuando más se pudo ver que Nadine no quiere entrar en duelos de vestuario fue en la cena de gala en el Palacio Real. La peruana eligió un vestido dorado de encaje con detalles estampadosen el cuello y en las mangas que contrastaba por completo con el vestido realizado en tul azul nochey con bordado de hojas en hilo y cristal marino, prusia y zafiro que estrenó DoñaLetizia. A eso debemos sumarleque mientras nuestra Reina llevaba una espectacular e histórica tiara,Nadine solo llevó unos pendientes de diamantes y una esclava de oro.