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Corín Tellado no podría soportar a Sara Carbonero
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Eduardo Verbo

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Eduardo Verbo

Corín Tellado no podría soportar a Sara Carbonero

Sara Carbonero produce hastío A este paso, Iker y Sara van a terminar teorizando en la próxima reunión de los Bilderberg sobre ósculos de tornillo para

Sara Carbonero produce hastío

A este paso, Iker y Sara van a terminar teorizando en la próxima reunión de los Bilderberg sobre ósculos de tornillo para dominar el mundo en prime time, que son su especialidad. Pero, tanta demostración de afecto, cariño y chupetones en San Francisco o Los Angeles produce un hastío, un tedio, que ni la misma Corín Tellado podría soportar. ¿No creen que ya está bien? “Me aburren que me matan”, que diría Lomana, tan refinada ella. De acuerdo que poco o nada tienen que ver los protagonistas cuando los periódicos han encontrado en su historia de amor el filón perfecto, pero la nueva Dulcinea de la Mancha podría haber gestionado su salto a la fama mucho mejor. La prudencia siempre es un activo. Salir a comprar el pan con el rimmel todavía mojado o ir en tacones a la piscina pone en evidencia que la presión, al fin y al cabo, es un caramelito dulce, muy dulce. ¡Qué vuelvan Rocío Jurado y sus calcetines de Cachuli!

Patricia Rato no es como Belén Esteban

Porque el concepto de madre o mujer coraje no encuentra su principio y fin en Belén Esteban, Patricia Rato encarna el término sin estridencias, ni cruceros de plató en plató. A todos los problemas con su ex marido, el torero Espartaco, la sobrina del presidente de Caja Madrid siempre responde con un "la familia bien, gracias", que nada tiene que ver con los desmanes que se pillaban Rosario Flores o Julián Muñoz cuando los reporteros se preocupaban por su abolengo. Y lo más importante, entre reunión con abogados y disgustos, como el de la semana pasada cuando no pudo entrar en su casa madrileña, Patricia encuentra tiempo para organizar con sus hijos y amigos otro tipo de encuentros más en la línea de los que las chicas de Wisteria Lane realizan en su apartment. Ser feliz es tan un solo una cuestión de voluntad.

Nadie se atreve a hablar de Penélope Cruz

Hablar sobre las fluctuaciones de peso de Penélope Cruz produce en los periodistas el mismo pavor que sentían cuando Álex, el hijo muerde-micrófonos de Ana Obregón, salía sin desayunar a la calle. Que si lleva ropa holgada, que si son exigencias del guión… Todo para terminar especulando sobre un virtual embarazo que, como sucedió con los brackets de Letizia, va camino de contar con su propio club de fans, gabinete de prensa y tour manager. Y ella, callada como Preysler. Tal vez, la noticia nunca llegue a ser una realidad, pero al igual que Luis Alfonso de Borbón tiene más complicado tomar la Bastilla que Froilán convertirse en heredero, Penélope va ganando las quinielas para alzarse con el Premio Limón al personaje más agrio. Una cosa es hablar sobre cuestiones privadas y otra es aclarar conceptos que están en boca de todos y cambian el devenir de un país. Ya hay algunos que gritan: ¡Viva la República independiente de Alcobendas!

 

 

Sara Carbonero produce hastío