Es noticia
Menú
Crónica Día 2
  1. Estilo
  2. Diarios de Motocicleta
Ángel Viñas i Aliau

Diarios de Motocicleta

Por

Crónica Día 2

Son las doce de la noche y estoy en casa de mi hermana en San Sebastián. Como explicaba ayer, íbamos a dormir unas tres horas, que

Foto: Crónica Día 2
Crónica Día 2

Son las doce de la noche y estoy en casa de mi hermana en San Sebastián. Como explicaba ayer, íbamos a dormir unas tres horas, que al final han sido cuatro. 

No sé si yo estaba demasiado cansado para roncar o mi hijo demasiado cansado para oírme, pero la noche ha sido pacífica.  

Hemos salido del hotel a las 9:00 y hemos tardado una más en encontrar el Cabo da Roca. Los GPS necesitan direcciones postales, no entienden de cabos o faros. Como hemos explicado, el Cabo da Roca es el punto más al oeste de la Europa continental. Está en 9º30’03’’W. Con ello ya hemos cumplido nominalmente con dos de los cinco objetivos del viaje. Ya hemos estado en el punto más al sur, Tarifa, y el más al oeste. Nos falta el punto más al norte, el más al este y el centro.

La carretera de acceso al faro es muy bonita y el paisaje espectacular. El mirador está elevado unos 140 metros sobre el nivel del mar y permite unas vistas de los acantilados y las playas próximas espectaculares. Estaba lleno de italianos. “Tuti insieme, per la foto”. Total, cincuenta sonrientes italianos tapando lo que se quería fotografiar. El bluetooth del casco de Ángel Jr. nos estaba dando problemas y no podíamos hablar entre nosotros. Hemos llamado a nuestro amigo Roberto de BMW Madrid, un encanto tanto él como Eva, para que nos ayudara. Nos ha dicho que creía poder resolverlo y por ello hemos decidido ir a Poitiers pasando por Madrid. Dos horas más de viaje, pero es esencial poder hablar entre nosotros durante el viaje.

Hemos salido de Cabo da Roca sobre las 12:30 y cinco horas más tarde estábamos con Roberto. El regreso a Madrid ha sido horrible por el calor. En Almaraz hacía 43º. Era como si te pusieran un potente secador de pelo en la cara. Por el campo había reses y algunos caballos atados sin una mísera sombra. Me pregunto cómo aguantan esos pobres animales y cómo puede haber ganaderos que dejen un caballo atado a más de cuarenta grados sin una sombra.

No hemos resuelto totalmente el problema, pero hemos encontrado la causa y lo trabajaremos. Hemos salido de Madrid a las 19:30 y hemos llegado a San Sebastian sobre las 23:00 horas.

He llamado a mi hermana Montse 20 minutos antes de tomar por asalto su casa. “Necesitamos cena, camas, una lavadora y guardar las motos en el garaje”. Estaba en Gerona, pero su asistenta nos ha atendido espléndidamente. Yo por si acaso me he vengado bebiéndome el Cardhu de mi cuñado. 

El objetivo de hoy era llegar a Poitiers, pero hemos empezado el viaje con 12 horas de retraso y no estamos siendo capaces de recuperarlas. Llevamos 36 horas efectivas de viaje y ya hemos hecho más de 2.500 kilómetros, pero no estamos consiguiendo recuperar el retraso y si no lo conseguimos, al final esto nos costará un día más.

Las motos no están dando ningún problema. Se nota mucho el ajuste del material con la temperatura. Cuando estamos por debajo de los 25 grados la moto suena ajustada, profunda, sólida. A 43º grados suena a hierros haciendo un hueco a codazos. Será cuestión de probar aceites más viscosos para estas temperaturas. 

Mañana trataremos de salir a las 8 y no lo haremos antes de las 9. No sé hasta donde podremos llegar. Las autopistas están muy cargadas, como es lógico en este fin de semana y no podemos ir durmiendo solo cuatro horas cada día.

Hasta mañana.

Son las doce de la noche y estoy en casa de mi hermana en San Sebastián. Como explicaba ayer, íbamos a dormir unas tres horas, que al final han sido cuatro.