Objeto de deseo
Por
Una hormiga de piedra que es una obra de arte (y viceversa)
La miro y me devuelve la mirada sin reconocerme. Es una escultura, claro, me digo, pero continúo mirándola y me atrapa. Quiero tenerla a mi lado y que recorra conmigo, pétrea, todos mis caminos
¿Qué es? "Una escultura en acero y piedra de la serie 'Hormigas' del escultor Luis González-Páramo".
¿Por qué la deseo? En la naturaleza hay bichos que me gustan y otros que no. No pongáis delante de mí (y mucho menos bajo mis pies, craaac) una cucaracha, pero sí me interesa la hormiga y sus connotaciones de fábula. En la obra de Luis González Páramo los bichos no se mueven, pero parecen dispuestos a recorrer tu pared, tu mesilla, tu jardín o el sitio que decidas que sea el hábitat.
Estas esculturas son el resultado de seleccionar piedras de arroyo de la Sierra Norte de Madrid y trabajarlas con alambre y redondos de acero. Cada una de las hormigas, arañas o insectos sin nombre son diferentes. El autor nos lo dice: "En mi mundo, cada objeto parece tener su propia idea de cómo quiere ser. Cada uno de ellos ha sido creado intentando evitar quitarle fuerza a los elementos que lo integran: las piedras o las maderas naturales son cuidadosamente escogidas para darle sentido, equilibrio e intención; la madera natural que arriba a la orilla, una vez tratada y estabilizada, es alterada por el hierro, que hace resaltar algunos de los atributos más significativos".
¿La tendré algún día? "Seguro que sí. No sé si será una araña, una hormiga o una lámpara (el escultor tiene una tendencia casi irracional a realizarlas con todo tipo de objetos reciclados), pero debo tener en mi colección una obra suya. ¿El precio? A partir de 150 euros".
¿Qué es? "Una escultura en acero y piedra de la serie 'Hormigas' del escultor Luis González-Páramo".