Los príncipes huyen de las cámaras en Mallorca

Los días en los que los príncipes de Asturias coincidieron juntos en Mallorca antes de acudir a los Juegos Olímpicos, no fueron muchos. Menos aun fueron aquellos en los que se dejaron ver por los periodistas. Una sesión de fotos de los príncipes con sus hijas subidos en un tren turístico con destino a Soller, supuso una de sus escasas apariciones públicas. Cuando salieron a navegar en el 'Somni', la embarcación que la Familia Real utiliza para surcar las aguas mallorquinas, prefirieron ser más discretos. En esa ocasión, y de forma clandestina, navegaron a las 8 de la mañana sin la presencia de periodista alguno que pudiese recoger una sola imagen de su paseo.

El gesto ha sido interpretado por los periodistas que trabajan en la zona como un intento de evitarlos. Para muestra de este intento de escabullirse de la prensa, otro claro ejemplo: la noche en la que los príncipes de Asturias fueron a cenar a El caballito de mar, un popular restaurante de la isla, evitaron a las cámaras saliendo por la puerta de atrás.

Y no es que esa puerta diese a algún lugar especial para ellos, sino todo lo contrario: los príncipes prefirieron salir por unos callejones oscuros antes que soportar la luz de los flashes. La indignación de la prensa ante el discreto paso de los príncipes de Asturias por Mallorca se suma a las muchas voces que aseguran que la princesa Letizia no es demasiado feliz cada vez que tiene que viajar a la isla.  

La prueba más evidente es que, este verano, su llegada se produjo tres días después de que el príncipe estuviese allí con las niñas. Todos los periodistas de la isla tienen presente la famosa frase que Letizia dijo ante una compañera de la profesión: "¿Tú crees que esto son vacaciones privadas?". Puede que las cámaras sean una de las cosas de la isla que más molestan a la princesa.