El colmo de la paradoja: Don Felipe compra en la tienda Príncipe por un día

La infanta Sofía ha vuelto a pasar el día de su sexto aniversario sin la compañía de sus padres y, de nuevo, ha tenido que ser su abuela, la reina Sofía, la encargada de hacer de ‘niñera’ en tan señalada fecha. Los príncipes de Asturias se han desplazado hasta Ámsterdam para representar a los Borbón en los festejos de coronación de los recién proclamados Reyes de Holanda. Este hecho histórico para los Orange ha obligado a la familia principesca a adelantar la celebración del cumpleaños de la pequeña de la casa, como ya ocurriese en 2011 con la boda de los duques de Cambridge.

 

Pocos son los detalles que trascienden de estos acontecimientos al incluirse en su ‘secreta’ agenda privada. Eso sí, siempre se logran desprender algunas máculas como el hecho de que fue la princesa Letizia la encargada de comprar los regalos arrasando en el Toys ‘R’ us o que don Felipe tenía como misión poner a punto la decoración de la fiesta.

 

Para llevar a cabo su propósito, el Heredero acudió paradójicamente a la tienda Príncipes por un día, del centro comercial Sexta Avenida de Majadahonda.

 

Aquí, el ilusionado papá eligió la temática de la fiesta que tenía preparada para la pequeña Sofía y se hizo con un amplio cargamento de dulces y pasteles de la Candy Table. Se trata de un pack que incluye tarta, bebidas, snacks o dulces como manzanas de caramelo, palomitas de colores o pasteles personalizados, además de diversos accesorios festivos como sombreros, matasuegras o confeti. Todo lo necesario para que la infanta Sofía celebrase su cumpleaños por todo lo alto y con todo lujo de detalles y se sientiese, como su madre, princesa por un día.