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El desafío: Patiño Vs. Farruquito
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Nacho Gay

Carta de Ajuste

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El desafío: Patiño Vs. Farruquito

That’s Entertainment! Eso lo sabe todo el mundo. Lo sabía David Frost cuando en 1977 entrevistó al cadáver político de Richard Nixon. Lo sabía también Richard

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El desafío: Patiño Vs. Farruquito

That’s Entertainment! Eso lo sabe todo el mundo. Lo sabía David Frost cuando en 1977 entrevistó al cadáver político de Richard Nixon. Lo sabía también Richard Nixon cuando en 1977 se dejó entrevistar por un presentador de variedades de dudoso talento llamado David Frost. Por aquellos tiempos, se había instaurado en el imaginario periodístico la idea desde entonces incorrupta de que el plano catódico de un hombre abatido valía más que mil confesiones post-Watergate. Ambos estaban en lo cierto. Y la película de Ron Howard que acaba de llegar a las salas lo narra de manera ejemplar. Dos tipos igualmente crápulas, dos tipos convencidos del infinito poder de la telegenia para conferir o reconstruir el prestigio, face to face en El Desafío. Vayan a verla.

El mismo desafío, pero diferentes protagonistas, tuvo lugar el viernes noche en Antena 3. De un lado, un bailaor flamenco, quizás demasiado flamenco, al que le gusta conducir sin carné. De otro, un grupo de entrevistadores del cuore comandados por Miss Yugular Patiño. El uno acudía al 'duelo' convencido de que un buen baile de aflicciones le valdría sin duda la redención. Los otros se personaron en el escenario del crimen con la convicción de que sacar un lágrima del rostro del doliente les valdría la gloria como pornoperiodistas y el reconocimiento del respetable.

Aparecía repetitivamente en pantalla el rostro plañidero de un Farruquito que se había mimetizado para la ocasión con la mismísima Virgen de Guadalupe. Tapaba sus vergüenzas el tal Farruco agachando la cabeza en los planos cortos. Entre los mechones de su melena gitana se entreveían las poses más fingidas que flamencas de un niñato que tenía en el bolsillo trasero de su pantalón hortera un cheque al portador con al menos cinco ceros. Mi más sincera felicitación a este chaval por su performance ‘eccehómica’ del viernes. Cojonuda. Ni Bambi lo hubiera hecho mejor. Y también le felicito, desde luego, por haber sabido rentabilizar con semejante parsimonia moral un homicidio involuntario.  

Pero felicito especialmente al equipo de Dónde Estás Corazón -DEC-, porque hay que tener un inquebrantable compromiso con tu profesión para salir al ruedo en tardes como la del viernes. Y sobre todo hay que ser muy friki para discutir en un debate de urracas, tras la entrevista, la dudosa moralidad de la misma. La doña María Patiño llegó a afirmar, en un intento desesperado por justificar su trabajo de esa noche y haciendo uso de un inusual talento para la comparación, que a ella le hubiese gustado entrevistar también a Hitler y Napoleón; para hablar con ellos del boatiné, supongo. Más de media decena de correveidiles poniendo en tela de juicio su propia profesionalidad, su filosofía de vida y su -dudosa- inteligencia. Hay mercados en los que todo está a la venta.

Lo sabía David Frost y lo sabía también Richard Nixon: un buen plano suele tener siempre un vastísimo valor, sobre todo cuando se traduce a euros. 

*Nota al pie: la entrevista al señor Farruquito le valió a DEC uno de sus datos más pobres de esta temporada: 16.9% y 2.083.000 espectadores. Amén.

That’s Entertainment! Eso lo sabe todo el mundo. Lo sabía David Frost cuando en 1977 entrevistó al cadáver político de Richard Nixon. Lo sabía también Richard Nixon cuando en 1977 se dejó entrevistar por un presentador de variedades de dudoso talento llamado David Frost. Por aquellos tiempos, se había instaurado en el imaginario periodístico la idea desde entonces incorrupta de que el plano catódico de un hombre abatido valía más que mil confesiones post-Watergate. Ambos estaban en lo cierto. Y la película de Ron Howard que acaba de llegar a las salas lo narra de manera ejemplar. Dos tipos igualmente crápulas, dos tipos convencidos del infinito poder de la telegenia para conferir o reconstruir el prestigio, face to face en El Desafío. Vayan a verla.