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¿Se puede querer tanto al vodka como a los hombres?
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Juan M. Fdez

Malditos Spoilers

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Juan M. Fdez

¿Se puede querer tanto al vodka como a los hombres?

Una de las máximas de cualquier programador de televisión para planificar la parrilla de una noche de domingo, la de mayor consumo televisivo de la semana

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¿Se puede querer tanto al vodka como a los hombres?

Una de las máximas de cualquier programador de televisión para planificar la parrilla de una noche de domingo, la de mayor consumo televisivo de la semana (256 minutos), es encontrar productos que estén en la misma línea para mantener atrapado al espectador toda la noche. Y sobre todo que esos productos sean de humor para que el espectador termine la semana y comience la siguiente con una sonrisa. Así ocurre con la ABC americana, que ha programado su nueva (y aburrida) serie GCB justo después de Mujeres Desesperadas intentando captar a su público, y así ocurre desde hace tiempo con Telecinco, con su noche dominguera dedicada a Aída.

 

Por eso no es de sorprender que Cosmopolitan TV haya decidido estrenar su nueva serie ¿Qué pasa con Chelsea? justo después de los nuevos capítulos de la tercera temporada de Cougar Town. Y es que, salvando las distancias, la nueva comedia estrenada por NBC el pasado enero 'bebe' sin ningún lugar a dudas de la serie de Courtney Cox.  Es decir, una comedia donde la protagonista es una mujer sin pelos en la lengua, a la que le gusta la diversión (y el alcohol) y sin miedo a experimentar cosas nuevas. 

 

Una ficción para romper tabúes sexuales y tratar temas actuales con naturalidad ("Tienes un montón de vello ahí abajo. Pero es gracioso porque parece un estropajo rojo", dice Chelsea en el episodio piloto), una serie donde vuelve a ponerse de manifiesto el papel de la mujer en la sociedad de hoy, una comedia que se suma a todas esas series que durante las últimas décadas han intentando variar la forma en la que la televisión retrata a las mujeres

 

No obstante, aquí no nos encontramos con una madurita en busca de jóvenes. En ¿Qué pasa con Chelsea? (Mucho mejor su título en inglés ¿Estás ahí vodka? Soy yo Chelsea?) Chelsea Newman una joven que trabaja como camarera en un bar. Newman es una fuerza de la naturaleza en estado bruto, acostumbrada a decir lo que piensa, atractiva y segura de sí misma, y disfruta abiertamente el sexo, pero sólo tiene un problema: se emborracha con demasiada frecuencia.

 

La rutina de Chelsea gira en torno a su trabajo en el bar, donde está rodeada de un grupo de compañeros y amigos algo extraño, tan variado en edad como en condición matrimonial, aspecto y actividad sexual. Entre ellos se cuentan su hermana Sloane (interpretado por la propia Chelsea Handler), madre primeriza y muy religiosa. Ella, por el contrario, es bastante liberal en cuanto a hombres se refiere, está dispuesta a vivir la vida a tope y no pedir disculpas por ello.

 

La acompañan en esta aventura sus dos compañeras de piso: su mejor amiga Olivia (Ali Wong), que también trabaja con ella en el bar, y Dee Dee (Lauren Lapkus), una joven inocente y dulce cuyo carácter no podría ser más opuesto al de Chelsea. En el bar, otro de los escenarios en el que se desarrolla la serie, también conoceremos a su padre Melvin Newman (Lenny Clarke, Rescue Me); Todd, un camarero enano interpretado por Mark Povinelli (Blancanieves (Mirror, Mirror), actualmente de estreno en la cartelera española); el responsable del bar Rick Miller (Jake McDorman) y una nueva camarera ex novia de Rick y bastante presumida llamada Nikki Natoli (Natasha Leggero).

Una de las máximas de cualquier programador de televisión para planificar la parrilla de una noche de domingo, la de mayor consumo televisivo de la semana (256 minutos), es encontrar productos que estén en la misma línea para mantener atrapado al espectador toda la noche. Y sobre todo que esos productos sean de humor para que el espectador termine la semana y comience la siguiente con una sonrisa. Así ocurre con la ABC americana, que ha programado su nueva (y aburrida) serie GCB justo después de Mujeres Desesperadas intentando captar a su público, y así ocurre desde hace tiempo con Telecinco, con su noche dominguera dedicada a Aída.