El color, el mejor aliado de la princesa a la hora de vestir

La princesa Letizia no suele usar colores muy atrevidos: grises, negros, blancos y beiges predominan en su armario. Sin embargo, cada vez que escoge una prenda en algún tono más cálido, su aspecto mejora notablemente. Su imagen se vuelve más fresca y juvenil, dejando a un lado la seriedad que la caracteriza en sus apariciones públicas. 

 

Solo hay que fijarse en este último mes. Sus looks más acertados han sido precisamente los llamativos, con tonos que dan luz a su rostro. Por el contrario, los eventos a los que acudió con prendas grises o negras aportan seriedad y distancia a su imagen. De hecho, las gamas oscuras echan encima a Letizia algún que otro año de más.

 

Uno de los colores que mejor le sientan, por su tipo de piel y tono de pelo es el fucsia; y ella lo sabe. Últimamente su armario se ha visto inundado de prendas y complementos en este color que, además de ser tendencia, resulta fresco. Rebecas, vestidos, bolsos: todas las opciones son buenas.

 

Con la llegada del buen tiempo, la Princesa de Asturias debería animarse más a usar pinceles vivos que alegren su vestimenta.