Del secreto al triciclo

Volvemos por un momento al autor del libro, el de no ficción. David Rocasolano colgó el viernes en su Twitter la foto de Letizia con el casco rosa y montada en el pequeño triciclo que sale en Adiós, Princesa. Más adelante colgó la del Príncipe en las mismas circunstancias. Pero la que está teniendo un éxito tremendo en internet es la de Princesa. Esa imagen es lo mejor que le ha pasado a la Princesa en mucho tiempo. Y dice Rocasolano que va a publicar más fotos que no se han visto nunca.

Volvemos por un rato al otro libro, al de ficción. Es decir, a El secreto de Letizia O. (Hiria), de David Barbero, cuya portada, como ya publicamos en Vanitatis, es una caricatura del Príncipe (muy reconocible) y de la Princesa (una cosa diminuta que abandona un zapato y se le sube a la chepa). En una entrevista concedida por el autor al blog Carta de las culturas este dice que su propósito es hacer un análisis de la realidad actual desde la ficción. La intriga tiene como base un chantaje sobre la princesa Letizia y sobre toda la familia real. Pero no como en el primer episodio de Black Mirror, donde el chantajeado era el Primer Ministro, que se tenía que beneficiar una cerda en público para soltar a la princesa secuestrada. Aquí, si no se aceptan las condiciones de los chantajistas, se dará a conocer un secreto que no se desvela hasta la última página del libro.

Le preguntan a Barbero: “¿Este personaje es claramente identificable con la princesa Letizia?”. Respuesta: “No solo es identificable. Es ella en persona. Como personaje de ficción, pero ella misma”. La acción está fechada en el verano de 2007. “En aquel momento, estaban pasando ya buena parte de las cosas que ahora han salido a la publicidad. Entonces no se conocían. Pero ya estaban sucediendo. Yo las recojo en la novela y las relaciono con la actualidad”. En uno de los pies de foto del post, se puede leer: “a David Barbero le gusta la interpretación de sus textos, por eso la novela de Letizia fue dramatizada en su presentación”. Y se ve a una serie de personas detrás de sus atriles leyendo el texto. Tendrían que hacer gira.