La prima Chantal y las infantas

Es millonaria, princesa de Grecia y Dinamarca, madre de cinco hijos, musa de Valentino, adicta a Instagram y desde hace unos años diseñadora de ropa infantil. Marie-Chantal Miller, la esposa de Pablo de Grecia, lo tiene todo. Sus prendas para los más pequeños alcanzaron su máximo apogeo cuando Harper Beckham, la mini fashion victim más internacional, lució unas bailarinas suyas. Las princesas europeas también han caído rendidas a sus pies. Hace poco veíamos a Estelle de Suecia con un vestido de tafetán rosa con nido de abeja que costaba 259 euros y que ahora podéis conseguir en su web por 100 euros. La heredera sueca no es la única que ha escogido esta marca para vestir a sus hijos. Mary de Dinamarca también se ha decantado en alguna ocasión por la firma de la prima política de su marido para sus dos hijos mayores, Christian e Isabella.

Sin embargo, nunca hemos visto a las pequeñas infantas de España vestidas con esta firma y eso que el príncipe Felipe es primo hermano del marido de Marie-Chantal. No sabemos si es porque a Letizia no le acaban de convencer los modelos cursis de la millonaria inglesa o solo deriva de la intención de defender la moda española infantil. Desde que nacieron Leonor y Sofía, sólo las hemos visto llevando ropa con sello nacional. La firma gallega Nanos –que tiene un precio moderado- es la que más predomina en su armario junto con los diseños exclusivos que les confecciona una modista asturiana. Pero a la princesa de Asturias también le gusta vestir a sus hijas con moda low cost –tal y como ella hace-. La semana pasada veíamos a la infanta Leonor con una camiseta de algodón con estampado de rayas y dos bailarinas en la parte delantera de Mango Kids, que , ya que sólo cuestan 12,99 euros.

Pero sinceramente, ¿por qué va a escoger nuestra Princesa a Marie Chantal si muchas de las otras royals se fijan en la moda española para sus hijos? El trío “A” de Holanda –Amalia, Alexia y Ariane- llevó diseños de Pili Carrera en la entronización de sus padres, Guillermo y Máxima, mientras que los hijos de los Reyes belgas siempre lucen creaciones de Gocco. Letizia mejor se queda con producto nacional que es de excelente calidad y así, de paso, se ahorra unas cuantas críticas.