Coincidencias reales

Resulta curioso que, viviendo en la cumbre de la moda, las princesas o reinas europeas coincidan tanto entre ellas. En el caso de Letizia, aunque ella no suele apostar por marcas internacionales -como sí hacen Mary de Dinamarca o Mette-Marit de Noruega-, en algunas ocasiones la hemos visto luciendo las mismas prendas -o muy parecidas- a las de sus tocayas europeas.

Las coincidencias con Mary van más allá de la moda. Las dos se casaron con apenas una semana de diferencia y tuvieron los hijos en los mismos meses. A la hora de vestir han coincidido varias veces, sobre todo con prendas de la marca Hugo Boss. La última fue con el polémico vestido negro con estampado en blanco allover. La australiana tiene justamente la misma falda y la combinó también con complementos en negros.

Aunque Letizia y Máxima son grandes amigas, resulta sorprendente que la argentina apareciera el verano pasado con una falda de estampado animal print de Uterqüe que había llevado la Princesa dos meses antes. Y digo sorprendente porque, aunque las dos son mujeres atractivas, sus estilos y sus cuerpos no tienen nada que ver. Mientras que la Princesa de Asturias es menuda y delgada y siempre suele apostar por la sobriedad, la reina holandesa es todo lo contrario: alta y exuberante y le encantan las pamelas grandes y los colores chillones.