Letizia, la mujer de rojo que eclipsó a la princesa Mary el día de su boda

Si uno pregunta en Dinamarca quién es Letizia Ortiz, uno de cada dos daneses contestará “la mujer del vestido rojo”. Muchos en el país nórdico todavía no han olvidado a aquella joven que apareció en el enlace de Mary y Federico del brazo del príncipe Felipe con un vestido poco adecuado para una boda real.

 

Como si de una actriz del Hollywood de los años 50 se tratara, la Princesa desfiló por la alfombra roja, colocada a la entrada de la catedral de Copenhague, en el gran día de su debut ante el resto de casas reales. Letizia quiso deslumbrar a todos aquel día. Y lo consiguió, pero robándole todo el protagonismo a la australiana. 

 

Aquel 14 de mayo de 2004, la Princesa de Asturias apostó por un diseño largo de Lorenzo Caprile de escote palabra de honor y mangas de gasa rojo. Para completar su look, doña Letizia se recogió el pelo con ondas, al más puro estilo Marlene Dietrich. 

 

Con paso firme y decidido, la prometida del príncipe Felipe posó ante los flashes y lució su espectacular vestido, que muchos calificaron de demasiado atrevido para un enlace real, un tipo de evento en el que nunca hay que elegir trajes demasiado vistosos. 

 

Mientras los asistentes a la ceremonia hacían su aparición ante las cámaras, las televisiones del país iban narrando todos lo que sucedía a la entrada del templo. Por aquel entonces, pocos conocían a Letizia, una joven periodista que iba a  contraer matrimonio con el príncipe Felipe unos días después en Madrid. Por eso, cuando los periodistas daneses vieron a la joven de rojo se quedaron si palabras: aquella joven no iba vestida para la ocasión. (Ver artículo publicado en JMNoticias)

 

"Aquí estoy yo, parecían decir los pasos de Letizia, del brazo del Príncipe, a su llegada a la Catedral de Copenhague, donde han asistido, junto a otros 800 invitados, a la boda del herdero de Dinamarca y Mary Donaldson. La novia de don Felipe se enfundó un espectacular vestido de Lorenzo Caprile, en crêpe y tul de seda rojo fuego, en el que prendió dos broches que le prestó la Reina Sofía, al igual que los pendientes de brillantes y rubíes Art Decó”, explicaba al día siguiente del enlace el diario El Mundo, consciente de la actitud de Letizia. 

 

Mary, la auténtica protagonista del día 

 

En el día de su boda, la princesa Mary lució un espectacular diseño en color blanco nacarado del modisto danés Uffe Frank, afincado en Milán, de escote redondo, mangas en forma de lirios, falda con vuelo y originales pliegues.

 

En cuanto a los complementos la australiana optó por una tiara, regalo de la reina Margarita de Dinamarca y unos pendientes de platino, diamantes y perlas de los Mares del Sur de la diseñadora de joyas Marianne Dulong.