Manolo Segura: "Tita debe arreglar sus problemas con Borja"

Hasta hace muy poco, Manolo Segura, padre biológico de Borja Thyssen, nadaba entre dos aguas sin comprometerse ni definirse ante el enfrentamiento que mantienen desde hace tiempo la Baronesa y su hijo. O bien daba la callada por respuesta si le pillaban en un acto social o salía por peteneras como fue  la única vez que acudió a un programa de televisión.

En La Noria  a lo más que llegó fue a explicar cómo Tita le contó a Borja, cuando éste tenía siete años, qué lugar ocupaba él en su ADN.  Una aclaración de lo más  pintoresca y que se resumía en la siguiente frase “Borja, Manuel también es tu papá. Tienes dos papás, uno rico y uno guapo".

Después de esta exposición nunca más volvió a tocar el tema y mucho menos a definirse públicamente. Carmen se mosqueó una barbaridad y Segura se convirtió en Harpo (el mudo de los Hermanos Marx).

Pero, el jueves, en la fiesta organizada por la empresaria  Maribel Yébenes para presentar su nuevo centro de medicina estética y belleza, no tuvo inconveniente en pronunciarse y asegurar: “Tita debe arreglarse con Borja y éste poner de su parte. Creo que no es bueno ventilar los asuntos familiares en público, porque los trapos sucios se lavan en casa”. Por una vez, se mojó e incluso llegó a enviar un mensaje a la baronesa “Si mi madre no hubiera aceptado a mi mujer, habría tenido un problema con ella”.

Esta declaración de principios tiene que ver con  la ausencia total de sintonía de Carmen Cervera con su nuera Blanca Cuesta, a la que no puede soportar. Además de Segura, que acudió con Paz Pastor, una señora estupenda que se ha mantenido al margen del interés mediático de su marido, no faltaron a la fiesta de  Maribel Yébenes y de su hija Miriam amistades y clientas.

Desde Nuria González a Lorenzo Caprile pasando por Carmen Machi, Marta Sánchez, Julio Ayesa, el doctor Plaza, Marisa de Borbón, Marta Sánchez, Marián Camino, Alejandro Lecquio, María Palacios,  Pedro y Begoña Trapote, Carlos Goyanes, Sofía Mazagatos, Valentín Paredes, Ramón Lezaun o Cary Lapique, que contó que su hija Carla aún no tiene claro cómo va a ser su vestido de novia.

La niña se casa el 16 de julio y tiene que elegir entre las muchas propuestas que le ofrece Rosa Clará, después de que Naty Abascal le aconsejara que eligiera a la diseñadora catalana. Por cierto, la estilista no pudo acudir a la reunión social y tampoco se dejó ver su hijo Luis Medina, quien entró el portal del edificio con una bolsa de compra que algunos creyeron  que se trataba de una dog´s bag.

Bibiana Fernández tampoco quiso perderse la fiesta y contó que se había cambiado siete veces hasta que encontró el modelito preciso: un vestido negro firmado por Lanvin. “Empecé mal porque lo primero que elegí fue el abrigo y por lo tanto lo de “dentro” no casaba. Los pantalones no me entraban, los vestidos no cuadraban y con los tops, como no tengo quien me abroche, no conseguía subir la cremallera. El mosqueo fue in crescendo hasta que dije basta, me planté y pasé del abriguito”. Todo esto lo contaba en la calle rodeada de otros invitados fumadores como ella y con una temperatura ambiente de cuatro grados.

Después de más de veinticinco años ofreciendo los mejores tratamientos de belleza personalizados, Maribel Yébenes consiguió lo que ahora parece imposible, que los famosos acudieran a su fiesta ‘gratis total’.

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