Carlos Baute pierde la memoria

Dice el refrán que de bien nacido es ser agradecido. Una frase que no entra en la vida actual de Carlos Baute. Al menos, después de leer sus declaraciones en la revista ¡Hola! donde cuenta que se va a casar con Astrid Klisan, de la que, dice, es y ha sido el amor de su vida.

El cantante se explaya alabando las bondades de su futura mujer y contando su historia de amor. Lo llamativo es que Baute ha obviado en todo momento a Beatriz Mirá, directora de comunicación de Alma Aguilar y su ex pareja de dos décadas, con la que convivió los últimos ocho años y con la que compartió absolutamente todo, como cualquier matrimonio joven. 

Lo fueron, aunque sin papeles legales, y de ahí el mosqueo de las amistades y, sobre todo, de la familia de Beatriz y de ella misma, que no se explican ese ninguneo. Aducen que no había necesidad de hacer daño y, mucho menos, omitir la relación, cuando todo el entorno de Beatriz arropó a Baute, a su madre, a la abuela y otros familiares cuando llegaron a España.

Tanto es así que el venezolano se convirtió en uno más de la familia Mira e incluso es el padrino del hermano pequeño de la que fuera su novia. Celebraban todos juntos los cumpleaños, las navidades y cualquier fiesta que se organizara. Baute era un hijo más, un hermano más, un nieto más y él estaba encantado de ejercer como tal. La abuela de Beatriz, a la que le encantaba viajar, corría con los gastos de todos ellos en periplos espectaculares como Bahamas o Punta Cana.

La relación de Baute con la familia de su novia era intensa y los lazos afectivos muy fuertes. De ahí el enfado y, sobre todo, la tristeza que han sentido Beatriz y las personas que apreciaban a ambos ante algunas de sus declaraciones inoportunas del cantante.

En un momento dado y sin venir a cuento, relata en ¡Hola! una anécdota que sucedió cuando Astrid Klisan tenía diecisiete años y Baute le dijo: “Vive tu vida, sal de fiesta , estudia, disfruta, porque tú yo terminaremos juntos y voy a ser el padre de tus hijos". Resulta que en aquellas fechas el desmemoriado artista ya había iniciado su noviazgo con Beatriz Mira que, entre otros de sus méritos profesionales, se encuentra el haber creado wishbone, el amuleto de la suerte que lucen estrellas internacionales como Jenifer Aniston o Misha Burton. 

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