Iñaki Muñoz de Ailanto nos explica los secretos de su última colección

Conocí a los Ailanto hace un par de años en la fiesta de un amigo común y tengo que reconocer que siento debilidad por estos gemelos y sus delicados diseños. A tan solo una hora de su desfile, Iñaki me recibe en el backstage mientras Aitor se encarga de organizar a las modelos. Enciendo mi Samsung Galaxy Alpha y me dispongo a grabar las confidencias que el diseñador me cuente. ¿Quién dijo que los secretos tienen que quedar enterrados?

Iñaki Muñoz: En infinidad de momentos, ¡demasiados! Siempre terminas dejando cosas para el final aunque lleves seis meses trabajando… Lo malo de las colecciones de septiembre es que te pillan las vacaciones en medio.

M.A.: ¿Cuándo empezáis a plantear la siguiente colección?

I.M.: Ya. La Primère Vision, la feria de tejidos de París, ha sido ya y esto es un no parar, pero qué te voy a contar a ti de esto que no sepas ya, Marita…

M.A.: ¡Aquí no se descansa nunca! Los estampados son siempre el eje de vuestra colección y veo que en esta ocasión hay una gran variedad.

I.M.: Casi siempre empezamos eligiendo tejidos, como la mayoría de los diseñadores, y luego vamos a por los estampados. Ya sabes que hemos estudiado Bellas Artes, así que somos de los pocos que creamos nuestros propios prints. Están inspirados en un viaje que hicimos a la Costa Azul de Francia. Muchos estampados tienen temática marina, como barcos y faros, olas… Hay prendas que tienen patos como esta, sobre estampado militar, y luego este dibujo que ves son plumas recortadas y montadas en este estampado. Otro tiene unos pajaritos más acorde al mundo de los batines, son pájaros posados sobre cañas de bambú.

I.M.: Nos los ha hecho una ceramista. Hicimos los dibujos y luego llevan redes de pescador y piedras.

M.A.: O sea que los referentes de la colección son…

I.A.: Nos inspiramos en la artista Dora Maar, una de las mujeres de Pablo Picasso. También nos fijamos en los cuadros que hizo sobre ella, porque estuvimos en la casa donde vivió, que se llama Ménerbes. Hoy es una casa para artistas.

I.M.: Yo sería más loco y Aitor más clásico. Él les pondría a todos de azul marino y de blanco y negro.

M.A.: ¿Cómo es la experiencia de diseñar juntos? ¿muchas discusiones?

I.A.: Siempre tenemos nuestros más y nuestros menos. Para decidir el desfile siempre hay alguna pelea, pero al final llegamos a un punto común.

M.A.: ¿Cuál es tu look preferido de la colección?

I.M.: Uno que tiene diferentes algodones. El trench está hecho con loneta de algodón y estampado de patos, y luego la blusa y el pantalón llevan diferentes texturas.

Una llamada interrumpe la entrevista. Iñaki alucina al verme responder con mi Gear S de Samsung.

M.A.: Ahora háblame de los zapatos, ¿Son una colaboración con alguna firma?

I.M.: Sí, se trata de una colaboración con Deux Souliers. Es una chica de Barcelona y es la segunda temporada que nos hace los zapatos. Son como los que se llevan para el río pero con plataforma.

I.M.: Yo echo mucho de menos a Marina Pérez.

M.A.: El Ailanto es un árbol que no invade todo. Imagina que pudierais invadir el armario de alguien para quedaros con todo.

I.M.: Puestos a invadir, invadiríamos todo el mundo para vender a todos. Me gusta mucho como viste Adrian Brody.

M.A.: ¿Y qué armario talaríais?

I.M.: El de demasiados…

M.A.: Ya para terminar, ¿qué básico tiene que tener una mujer en su fondo de armario?

I.M.: Un vestido. Nuestras colecciones siempre se basan en vestidos. Hay monos y pantalones, pero siempre apostamos por vestidos combinados con prendas exteriores.

M.A.: Planes para el futuro.

I.M.: París dentro de 10 días, vamos a la Feria para vender la colección en el extranjero.

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