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La subida de audiencia de María José Campanario
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La subida de audiencia de María José Campanario

A pesar de que Lequio y María Palacios estaban a punto de pasar por la vicaría, el viernes por la noche alguien les robó el protagonismo

Foto: La subida de audiencia de María José Campanario
La subida de audiencia de María José Campanario

A pesar de que Lequio y María Palacios estaban a punto de pasar por la vicaría, el viernes por la noche alguien les robó el protagonismo en los programas de televisión. Al menos en ¿Dónde estás corazón?. No fue Jaime Cantizano, que a altas horas de la mañana se hizo con el Guiness de los récord por ser el hombre al que más besos le han dado en un minuto (concretamente 89), ni Mariñas, que, tras un par de intentos fallidos -por la resistencia que ofrecía el guapo presentador- fue el protagonista de un casto beso en la frente del conductor del programa.

 

Los protagonistas de la noche fueron los Janeiro, los Campanario y hasta Belén Esteban, pero ni juntos, ni revueltos. Y es que el programa de Antena 3 llevó a plató a Laly Bazán, hermana de Carmen y tía de Jesulín, para saber como estaba el patio en Ambition’s House. Aunque habló y palabras dijo, tampoco hubiese hecho falta, a tenor del trabajo que tuvo la centralita telefónica esa noche. Ríanse ustedes de la del Telemaratón o de la de la bruja Lola.

Precisamente “bruja”, y no precisamente por sus dotes adivinatorias, fue el apelativo que la tiísima dedicó a Campanario en numerosas ocasiones. Y claro, aunque la señora de Ambiciones tiene sus detractores, también tiene quien la defienda. Igual que Belén Esteban defiende a capa y espada a su Andreíta, papá Campanario levantó el auricular del teléfono para pasárselo a su mujer que tenía que decir su niña es muy buena y que las descalificaciones de Laly no iban a ninguna parte.

Cantizano estaba al borde del colapso. Llamó Belén Esteban, por alusiones y hasta la propia Maria José Campanario que pidió tranquilidad y que la dejaran en paz en directo. Eso sí, cuando se puso en contacto con el programa, el encargado de coger el teléfono fue uno de los redactores que al oír “soy María José Campanario” hizo la evidente pregunta “¿Cómo sé yo que eres quien dices ser?”, a lo que ‘Campa’ respondió “pínchame en Antena que te voy a subir la audiencia”. Y es que la mujer del diestro 'también tiene su público', que diría aquel.

La mujer de Jesulín entró en directo. Habló, derramó alguna que otra lágrima y cogió al toro por los cuernos. Que para eso, en peores plazas ha toreado. Al final, cada cual se quedó como estaba; Carmen Bazán con sus seguidores, Belén con los suyos y Campanario con quienes la apoyan. Laly, ante el tremendo follón que había organizado hizo mutis por el foro sin esperar a que Cantizano le dijera adiós. ¿A cuanto habrá ascendido el importe total de las llamadas de los Janeiro, Campanario y Esteban? ¿Le echará una mano la amantísima hermana Laly a Carmen para pagar el alquiler de su nueva casa de soltera con la cuenta de su paso por plató?

A pesar de que Lequio y María Palacios estaban a punto de pasar por la vicaría, el viernes por la noche alguien les robó el protagonismo en los programas de televisión. Al menos en ¿Dónde estás corazón?. No fue Jaime Cantizano, que a altas horas de la mañana se hizo con el Guiness de los récord por ser el hombre al que más besos le han dado en un minuto (concretamente 89), ni Mariñas, que, tras un par de intentos fallidos -por la resistencia que ofrecía el guapo presentador- fue el protagonista de un casto beso en la frente del conductor del programa.