Las reivindicaciones de los espermatozoides

Se lleva lo de regalar espermatozoides, sí, se lleva. Y si no, sólo hay más que fijarse en las noticias de aquí y allá. Por ejemplo, ese amigo de Michael Jackson, que va y dice que es el padre biológico de la única hija mujer del Rey del Pop, Paris, de once años.

Este caballero inglés, Mark Lester, que es además el padrino de los tres hijos del cantante fallecido, dice haber realizado una donación de esperma en 1996, para que su amigo del alma pudiera ser padre y que cree que Paris es su hija. Si los ojos son el reflejo del alma, también pueden ser reveladores de paternidades varias, que uno no tiene que fijarse mucho en el parecido entre los misteriosos ojos azules de París y el de su posible papá.

Según las informaciones de varios periódicos estadounidenses,el regalo espermatozoidal tuvo lugar en febrero de 1996 en una clínica londinense. Meses después, Michael se casó con la enfermera Debbie. Paris nació en 1998. La versión del amigo Lester ha sido apoyada en todo momento por un amigo común, el mago Uri Geller, quien aseguró al canal Sky News: "Lo he sabido siempre porque Michael me lo contó".

Pero la verdad, no hay que irse tan lejos para encontrar historias tan apasionantes que aquí, en suelo patrio tenemos el insólito asunto de los  Thyssen,  que todavía da que hablar ese espermatozoide vago y sin nombre, padre de las mellizas de la mamá Baronesa. Y los ríos de tinta que corrieron en su momento con la paternidad de Sacha, el hijo de Blanca Cuesta y Borja. Hasta tres pruebas de paternidad dicen que se tuvo que hacer el muchachote para que su madre le creyese. Por cierto, que la cosa de la semillita, está en manos de abogados. Como debe ser y más ahora que Blanca espera otro bebé.

Y si se trata de alquilar, donar o regalar no hay que olvidar los vientres, que también parece estar de moda regalarlos como si fueran una tarjeta del Corte Inglés...  Ricky Martín, Sarah Jessica Parker, el propio Jackson... todos alquilan, donan, regalan o compran lo que se venda.