Belén Esteban, cada día más Paris Hilton

“Yo soy Belén Esteban y punto”, dijo la televisiva tras descubrir su nuevo rostro en su programa. España se conmocionó al ver el resultado de la operación de estética al que se sometió y, como sucedió con la dichosa fotografía de las hijas de Zapatero con Obama, se organizó el belén. La nueva Esteban se parecía a vivos y a muertos. Michael Jackson, Cher, Carmen Janeiro…y hasta incluso Paris Hilton. Nombres y más nombres… La revista que publicaba las primeras imágenes en exclusiva hizo el agosto y se aseguró un hueco en los anales del corazón. Algo así no sucede todos los días.

Fue entonces, cuando la propia Belén zanjó la polémica que se había organizado -los montajes y collages se multiplicaban casi por generación espontánea- y cogió de nuevo el toro por los cuernos. Conociendo el carácter que se gasta, sus palabras parecían un requiebro. “Arriba la Esteban” y “me entiendes”, antaño lema diferenciador de la colaboradora de Sálvame, ya no suenan tan bien. Han creado escuela pero la colaboradora de Jorge Javier es otra por dentro y por fuera y poco tiene que ver con Paris Hilton, la que insistentemente sonaba como su facsímil más próxima, y que, para empezar, no tiene prole.

La multimillonaria encaja en el prototipo de chica pija y malcriada. Todo lo contrario que la ahora princesa de San Blas. La televisiva es toda una madre coraje -cuidado con su Andreíta -y trabaja de sol a sol, aunque sus detractores critiquen que lo haga a costa de su vida. Pero si algo comparten, salvando las distancias y la entidad espacio-tiempo, es el mismo color de mechas, el calor del público -aunque aquí gana por goleada Belén- y su gusto por los cachorros.

Todo con sus debidas connotaciones, porque no es lo mismo un bulldog que un chihuahua, que responde al nombre de Campanilla. El nuevo perro de la Esteban no es ciertamente suyo, sino de su Andrea. Fran se lo ha regalado. Lo mismo que ha hecho Victoria Beckham con su marido. Se ha gastado casi 3. 000 euros en un perro de la misma raza que el de Andreíta: un bulldog en toda regla.¿Se habrá gastado Fran la misma friolera que la ex Spice Girl? ¿Ladrará el pequeño cachorro al ver a mamá Belén dando las campanadas en la pantalla de televisión?