Revenga supera su ostracismo acompañando a la infanta Elena a los toros

Carlos García Revenga ha vuelto a la escena pública. Después de pasar varios meses recluido en sus quehaceres, evitando ser ‘cazado’ por los ávidos objetivos de las cámaras, finalmente el secretario de las infantas ha decidido dejarse ver. La ocasión elegida no era un acto institucional en el que su deber como asesor de las hijas del Rey le obliga a permanecer a su lado, sino una tarde de toros en la madrileña plaza de Las Ventas, donde se sigue celebrando la fiesta de San Isidro.

Tras conocerse en febrero la imputación de García Revenga en el caso Nóos, éste dejó de relacionarse públicamente con la infanta Elena. Se desconoce hasta qué punto esta medida fue iniciativa propia o una recomendación de Zarzuela, pero desde que se produjo ese momento clave, la duquesa de Lugo continuó atendiendo su agenda oficial en representación de la Familia Real sin su mano derecha.

Como miembro del staff de la Casa del Rey, y a tenor de su relación con las supuestas actividades delictivas llevadas a cabo en el Instituto Nóos, Revenga prefirió no asociar más su desgastada imagen a la institución. Esto se ha traducido en un ostracismo que ha durado cerca de tres meses y que por el momento sólo se ha roto este miércoles para asistir a una actividad lúdica junto a la infanta Elena. Pero su presencia en Las Ventas no se debe a su condición de asesor, sino como amigo íntimo y gran aficionado al arte del toro. Cuando retomará su labor profesional continúa siendo un misterio.