Blanca Cuesta y los malos olores

Parecía que no le iba mal en su nueva faceta como pintora pero Blanca Cuesta ha decidido dejar a un lado su pasión por el pincel. Lejos de pasar por un momento de sequía creativa, la nuera de la baronesa Thyssen es incapaz de ponerse delante de un lienzo sin sentir las primeras molestias de su cuarto embarazo.

El motivo no es otro que el fuerte olor de las pinturas. “Por el momento, he dejado la pintura. Es que huele fatal”, aseguró este jueves por la noche en la fiesta del Hotel Me de Madrid. A punto de cumplirse su primer trimestre de gestación, no será hasta finales de otoño cuando retome con mayor entusiasmo su trabajo como artista, algo que le ha reportado ingresos bastantes jugosos. Tal y como publicó Vanitatis el pasado mes de enero, Blanca vendió ocho cuadros valorados en más de 25.000 euros en su primera exposición en solitario. A esto hay que sumar los otros 4.000 que consiguió el febrero del pasado año.

Acostumbrados a anunciar sus embarazos en su revista de cabecera, en esta ocasión fue una filtración la que dio al traste con su próxima exclusiva, algo que enfadó mucho al matrimonio ya que hubiese preferido esperar un tiempo prudencial antes de comunicarlo para que no se repitiera lo que ocurrió en 2009. En agosto de ese año la pareja posó en exclusiva para ¡Hola! anunciando la llegada de su segundo hijo, sin embargo días después enviaron un comunicado anunciando un aborto a las 8 semanas.