La Reina celebra San Valentín en Rabat con el famoso Armani que lució en su pedida

Y continuamos con la agenda de los Reyes en su visita de Estado a Marruecos que la mañana de este jueves los ha llevado hasta el mausoleo en el que se encuentran los reyes Mohamed V y Hassan II. Es tradición que en sus viajes al país, los mandatarios presenten sus respetos a los difuntos monarcas. Ya sucedió en 2014, durante la presentación oficial que don Felipe y doña Letizia hicieron como nuevos Reyes y ahora han repetido acto.

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Puestos a repetir, debe haber pensado la reina Letizia, ella también ha lucido el mismo velo que en la anterior ocasión, hace ya casi cinco años. Y es que para entrar al mausoleo es peferible que las mujeres se cubran la cabeza y la esposa de Felipe VI ha seguido la norma a rajatabla. La primera vez que la vimos con este mismo velo fue en su viaje a los Emiratos Árabes en 2010, en su visita a la mezquita del jeque Zayed Al Nahyan. Está claro, pues, que no iba a complicarse y ha elegido la misma fórmula que las dos veces anteriores.

Un guiño de San Valentín

Y cuando decimos que ha seguido las mismas pautas que en los Emiratos y que en su anterior visita a Marruecos es porque el ya citado velo lo ha combinado con un sastre blanco que al principio pensábamos que era nuevo, pero no. Fue el mismo con el que conocimos a Letizia Ortiz como prometida del entonces Príncipe de Asturias. Así es. Se trata de aquel dos piezas de Giorgio Armani de escote chimenea que lució en su compromiso oficial en El Pardo en noviembre de 2003.

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Ha llovido mucho, pero lo cierto es que a la ahora Reina le sigue sentando como un guante el diseño italiano. Cabe recordar que se la criticó mucho por elegir una firma internacional y que incluso se llegó a decir que había preferido pantalón antes que vestido porque no le gustaban sus rodillas. Ahora, casi 16 años después, sabemos a la perfección que no tiene ningún problema con esa parte de su cuerpo.

Además, esta elección nos demuestra una vez más lo detallista que es doña Letizia, ya que ha decidido recuperar tan importante prenda en un día tan señalado como San Valentín. Ya que no han podido disfrutar de este día en algún lugar recóndito y les ha tocado trabajar -como a todos los mortales-, al menos ella ha querido tener este guiño con don Felipe, dejando claro que su amor está como el primer día.

La Reina ha completado su estilismo con unos nuevos salones en color nude que nos recuerdan a las babuchas, el tradicional calzado marroquí. Aunque en las fotos apenas se aprecia porque lleva el velo puesto, sabemos que doña Letizia lucía los pendientes de perlas australianas y diamantes que tiene desde el nacimiento de la princesa Leonor y que utiliza, sobre todo, en las grandes ocasiones.

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Tras la visita al mausoleo, doña Letizia se ha dirigido al colegio Segunda Oportunidad de Salé, donde ha podido conocer de primera mano y acompañada por Lalla Meryem, hermana del rey, la situación de los niños y jóvenes en acoga y reinserción. Después de esto, y ya otra vez con Felipe en la residencia del embajador, ha mantenido un a audiencia con escritores marroquiés de lengua española.

La agenda de la Reina no termina aquí, ya que esta tarde a las 19:00 horas habrá una recepción de los Reyes a la colectividad española residente en Marruecos en la Biblioteca Nacional de Rabat. Esperamos verla con otro look.