Es noticia
Menú
Masturbación femenina: ¿es de verdad como la imaginan en las películas?
  1. Estilo
  2. En la cama con Marita
Zoe Robledo

En la cama con Marita

Por

Masturbación femenina: ¿es de verdad como la imaginan en las películas?

El cine, la televisión o la música podrían ser grandes aliados para visibilizar y normalizar el placer femenino, pero ¿cuánto camino nos queda por recorrer para que deje de ser un tabú?

Foto: Imagen: Victoria's Secret.
Imagen: Victoria's Secret.

La masturbación femenina es otro de los tabúes que en pleno siglo XXI son difíciles de comprender. La razón por la que continúa siendo un estigma es, probablemente, el que el placer femenino siga siendo demonizado y silenciado, razón por la cual no me cansaré de repetir cuán necesario es que las mujeres hablemos de sexo en los medios.

El que iconos del pop como Selena Gomez lancen al mercado canciones como 'Can't Keep My Hands to Myself' es una señal inequívoca de que la situación comienza a cambiar. Beyoncé y Nicki Minaj también han hecho de la masturbación parte de sus canciones gracias a su 'Feeling Myself', por lo que por fin comenzamos a hacerla parte del imaginario cultural, ese que construye la normalidad y que es eminentemente patriarcal.

'Sexo en Nueva York' introdujo en la pequeña pantalla la masturbación femenina de la mano del archiconocido –a partir de entonces– vibrador con forma de conejito rosa. Yo sigo sin comprender la necesidad de hacer uso de algo 'cuqui' para lograr el placer, pero cada uno tiene sus gustos, claro está. El problema es que, como afirma Marti Noxon, cocreadora de la serie 'UnREAL' –que incluye una secuencia de masturbación femenina sin atisbos eróticos, sino erigida como un acto completamente normalizado– cree que el silencio que se cierne en torno a la masturbación de las mujeres se debe en gran parte a que el onanismo hace sentir a los hombres incómodos. “Creo que les incomoda porque les asusta la idea de que el sexo no siempre vaya asociado al romanticismo, lo que implica que las mujeres no sentimos la necesidad de tener a un hombre cerca para satisfacernos”, asegura.

Por otra parte, Sybil Lockhart, investigadora de la web OMGYes –centrada en educar acerca del placer femenino–, cree que muchas mujeres asocian la masturbación con excitar a los hombres. “Algunas ven en el onanismo un medio para excitar a sus parejas y esto queda claro en la forma en que lo hacen. Arquean su espalda emulando a las actrices porno, pero en muchos casos, no tiene nada que ver con cómo se masturban ellas en su vida real. Les asusta pensar que a los hombres no les ponga cómo lo hacen realmente”, explica.

En la ficción televisiva y cinematográfica, la masturbación masculina es mucho más habitual, aunque lo cierto es que suele tener un matiz cómico asociado o se relaciona con un momento incómodo en el que la pareja aparece y descubre el pastel. Y con esto no me refiero al que utilizan en la película 'American Pie' como aliado cómico de la masturbación. Pero cuando es una mujer la que se toca a sí misma, en pocas ocasiones se impone la normalidad.

"La mujer no se masturba ante el espejo, ataviada con su mejor lencería, y gimiendo como una gatita en celo"

En la serie 'Fleabag' su protagonista se masturba ante su ordenador mientras engulle patatas fritas y ve un discurso de Obama. Por supuesto, hay cierta comicidad en la situación, pero la masturbación no se esboza de forma sensual y su objetivo no es excitar a un hombre, como suele ser habitual en la ficción. Es decir, la mujer no se masturba ante el espejo, ataviada con su mejor lencería, y gimiendo como una gatita en celo. La protagonista lleva ropa de estar por casa, mastica con gula y descaro y hace muecas que no se asemejan a las que las actrices porno hacen en sus películas.

Lo habitual es que, como cuenta la escritora Ann Friedman a 'The Cut', la masturbación sea algo que en la ficción únicamente hacen las chicas malas, por lo que el mensaje que se manda es que el onanismo no forma parte del onanismo de las chicas 'buenas' o 'normales'. Ryan Murphy, al hablar de la película 'The Temp', aclaraba que el retratar a una 'femme fatale' psicótica era por aquel entonces (hablamos de 1993) muy exigente. Películas como 'Instinto Básico' habían hecho que se requiriera mucho más que gritos y sangre a borbotones para crear tensión, y en ese marco una escena de masturbación femenina emergía como salvavidas para crear este ambiente. Esa es la razón por la que la ficción retrataba a la mujer psicótica, retorcida o malévola como una mujer que no solo tenía pensamientos psicóticos o guardaba un cuchillo en su bandolera, sino que también se masturbaba.

¿Qué queda por hacer?

Por su parte, la sitcom 'Louie', cuando intentó reflejar que un personaje femenino no estaba en sus cabales, tiró de la carta de la masturbación. La mujer en cuestión se masturbaba en medio de un bar junto al protagonista para demostrar que algo andaba mal en su cabeza, por lo que la asociación onanismo-desequilibrio mental volvía a florecer. Cuando por fin una serie vinculó el onanismo al placer y a la excitación, como ocurrió en un capítulo de 'Girls' en el que el personaje de Marnie se encierra en un baño público para tocarse presa de la excitación, las redes sociales se escandalizaron y los medios se apresuraron a preguntarle si fue muy duro rodar dicha escena.

Todavía queda mucho por hacer para visibilizar y dotar de normalidad a la masturbación femenina, y quizás la razón radique en que la mayoría de los guionistas son hombres. Quién nos iba a decir a nosotros que sería Selena Gomez una de las mujeres que más contribuirían a normalizar la masturbación... Porque mientras que ella afirma no poder quitarse las manos de encima, nosotras no podemos quitarnos las manos de la cabeza.

placeholder Portada de 'Antimanual de autodestrucción amorosa' (Editorial Aguilar)
https://cms.elconfidencial.com/front/list/Portada%20de%20'Antimanual%20de%20autodestrucci%C3%B3n%20amorosa'%20(Editorial%20Aguilar)

'Antimanual de autodestrucción amorosa' (ed. Aguilar) es el primer libro que publica la periodista Marita Alonso, quien se ha convertido en nuestra consultora semanal en cosas de amor, desamor, sexo y otras dichas y desdichas. Plantéale tus preguntas e intentará darles respuesta.

La masturbación femenina es otro de los tabúes que en pleno siglo XXI son difíciles de comprender. La razón por la que continúa siendo un estigma es, probablemente, el que el placer femenino siga siendo demonizado y silenciado, razón por la cual no me cansaré de repetir cuán necesario es que las mujeres hablemos de sexo en los medios.

Películas Tabú SQUIRT