Es noticia
Menú
No conoces el término que refleja cómo te ignora tu amante, pero la práctica te suena
  1. Estilo
  2. En la cama con Marita
Marita Alonso

En la cama con Marita

Por

No conoces el término que refleja cómo te ignora tu amante, pero la práctica te suena

Lo sabemos: estamos a dos términos de construir un nuevo diccionario 'tinderesco', pero hay tantas formas de que pasen de ti que este es un campo inacabable. Descubre lo último.

Foto: Imagen: Donna Karan (Peter Lindbergh)
Imagen: Donna Karan (Peter Lindbergh)

Ah, ¡los anglosajones y su inacabable vocabulario con el que hacerte ver cómo tu amante pasa olímpicamente de ti! Como es tan habitual que las relaciones nacidas de Tinder se vayan al traste -lo séee, lo séee, quizás esté hablando de 'Mi vida amorosa' y no de 'La generalizada', pero para algo soy yo la que firmo el texto, ¿no?-, no es de extrañar que exista un sinfín de términos que den nombre a las diferentes formas de ignorar y de ser ignorado en la era del amor 2.0. Lo último es ser ‘firedoored’, que se llama así por hacer alusión a las puertas de incendios, esas que muestran que solo hay una salida posible. Uno de los dos no puede acceder donde el otro está, mientras que esa otra persona corre hacia el otro a toda la velocidad, como si estuviera en un incendio del que escapar mientras su acompañante se encuentra en la parte segura. Bonita y dolorosa metáfora, ¿eh?

Seguro que te suena eso de que siempre hay un miembro de la pareja más entregado que el otro, ¿verdad? Desafortunadamente, esta afirmación suele ser una hiriente realidad, pero cuando hablamos de aventuras o de las fases iniciales de una potencial pareja, es muy común que una de las partes tenga a la otra en el olvido hasta que su agenda se vacía o hasta que la lascivia llama a su puerta. Hablamos del caso 'del que jamás llama ni escribe' versus el 'del que lo deja todo cuando ese alguien por fin da señales de vida'. Tengo que reconocer que da un poco de pavor que me digáis que no sabéis de qué os estoy hablando, porque yo siempre he sido la pringada que es más que consciente de que Fulanito dijo que llamaría el lunes y que estando a jueves no ha dado aún señales de vida. Esta pringada, pasadas tres semanas, recibía una notificación del tal Fulanito para quedar, y aunque tenía planes -porque una es pringada, pero también tiene vida, que conste-, lo dejaba todo para ver al esquivo ser.

Lo peor de que te estén haciendo la estrategia de la puerta de incendios es que solo hay una salida, la que te empuja a huir. Quiero decir, es más que necesario escapar de este tipo de relaciones, de acuerdo, pero no es una de esas prácticas a las que puedas dar la vuelta para de repente convertir al Zombie, al Fantasma o al Phubber -y me estoy dejando una decena de términos- en el hombre ideal. Bueno, tampoco exageremos, en un hombre que al menos se digne a llamarte, a responder tus mensajes y a quedar cuando así lo ha prometido. Lo sé, ¿es esto todo lo que podemos esperar de una relación en el 2018? ¿Acaso nos hemos acostumbrado a aceptar trabajos precarios, a vivir en pisos minúsculos y a salir con hombres que solo nos dan unas migajas de lo que de ellos esperamos? ¿Estamos hechos para conformarnos y no para realizarnos? Madre mía, esto me ha quedado muy Carrie Bradshaw. Me voy a llorar al baño un rato y ahora regreso para terminar el texto...

Quizás la culpa de esto sea el golpe de realidad que nos hemos dado de la mano de diversas autoras que nos han enseñado que Disney es una falacia. Tal vez, saber que el Príncipe Azul no existe nos ha convertido en daltónicas emocionales que nos conformamos cuando un príncipe parece tener, al menos, algún color.

Los indicios del 'firedoored'

Como si te estuvieras enfrentando al prospecto de un medicamento, lee los síntomas y si reconoces alguno, trata el daño.

  • Nunca responde a tus mensajes o a tus planes, pero tú siempre a los suyos.
  • Jamás logras que se apunte a un plan apetecible, pero tú eres capaz de dejar el pijama o a tus mejores amigos si te propone salir a tomar algo.
  • Cuando eres tú quien escribe, responde de forma distante, pero cuando es él el que lo hace para quedar, es encantador.
  • Si te lo encuentras, será un borde y hará ver a sus amigos o a los tuyos que apenas os conocéis, pero si es él el que te lleva a una quedada, hará como si fueras la mujer más maravillosa del mundo.
  • Nunca hace planes futuros, aunque estemos hablando de tomar algo en dos semanas.

placeholder Portada de 'Antimanual de autodestrucción amorosa' (Editorial Aguilar)
https://cms.elconfidencial.com/front/list/Portada%20de%20'Antimanual%20de%20autodestrucci%C3%B3n%20amorosa'%20(Editorial%20Aguilar)

'Antimanual de autodestrucción amorosa' (ed. Aguilar) es el primer libro que publica la periodista Marita Alonso, quien se ha convertido en nuestra consultora semanal en cosas de amor, desamor, sexo y otras dichas y desdichas. Plantéale tus preguntas e intentará darles respuesta.

Ah, ¡los anglosajones y su inacabable vocabulario con el que hacerte ver cómo tu amante pasa olímpicamente de ti! Como es tan habitual que las relaciones nacidas de Tinder se vayan al traste -lo séee, lo séee, quizás esté hablando de 'Mi vida amorosa' y no de 'La generalizada', pero para algo soy yo la que firmo el texto, ¿no?-, no es de extrañar que exista un sinfín de términos que den nombre a las diferentes formas de ignorar y de ser ignorado en la era del amor 2.0. Lo último es ser ‘firedoored’, que se llama así por hacer alusión a las puertas de incendios, esas que muestran que solo hay una salida posible. Uno de los dos no puede acceder donde el otro está, mientras que esa otra persona corre hacia el otro a toda la velocidad, como si estuviera en un incendio del que escapar mientras su acompañante se encuentra en la parte segura. Bonita y dolorosa metáfora, ¿eh?

Tinder The Walt Disney Company Relaciones de pareja
El redactor recomienda